Hoy puedo presentar la obra MARE NOSTRUM completada. Parte del trabajo ha estado seleccionado y expuesto en las provincias andaluzas, formando parte del XXI Premio Bienal Unicaja de Artesanía Jaén 2011.

Esta obra corresponde a un trabajo con volúmenes que inicialmente consideré con el nombre de  Thoracata, un proyecto creativo de expresión sobre un volumen de un torso convencional a tamaño real utilizando de material-soporte el cuero. Del mismo modo que en las “thoracatas” clásicas sus relieves expresaban ideas y acontecimientos, aquí también va a servir la forma del torso y el material de soporte, el cuero, para la expresión plástica y artística.

Este experimento plástico que, en el tiempo, coincide con los trabajos sobre lugares que estaba realizando en formatos bidimensionales, quedó imbuido de esta temática y derivó finalmente en la obra que ahora os presento.

Con MARE NOSTRUM quiero evocar el lugar común, en un amplio concepto de “mar nuestro”, como lugar de encuentro, intercambio, confrontación…, que durante siglos ha ido forjando una cultura rica y vasta que nos conforma como somos, por eso en la obra he querido reflejar ese “mar” que se extiende sobre el soporte de un torso femenino que se puede interpretar como la fecundidad y continuidad de la cultura, la genetrix de los romanos, que trascendía el mero hecho de la reproducción por el concepto de perdurabilidad en el tiempo.

Aquí, mi lenguaje plástico sigue apoyado en los textos, usuales en mi obra, en el teñido y tintado sobre la base de los azules, verdes y tierras-rojas y también en los signos y elementos decorativos que nos sirven como referentes iconográficos del motivo de la obra, sobre todo, he querido que quede evidente y con gran protagonismo la representación del agua (el mar, las olas) como se hacía en las culturas clásicas del Mediterráneo, el mar y la referencia a lugares geográficos, ese lugar que situamos y buscamos en las cartas marinas, en los mapas, con las rosas de los vientos que nos señalan direcciones, lugares, espacios que parecen intangibles pero que, finalmente, están acotados, como ocurre con la superficie de la obra que también tiene sus propios límites y en los que estamos obligados a expresarnos. Por todo ello, este mar, común de experiencias y acontecimientos, queda acotado en el mapa de un cuerpo que emerge de la sal. 

MareNostrum – 2013  -  1,600 x 0,700 (cuatro piezas) - Mixta y guadamecil en cuero moldeado sobre sal.

Juan J. García Olmedo